Fráncfort del Meno, Alemania (Weltexpress). El hecho de que Janet Yellen, como secretaria del Tesoro estadounidense en funciones bajo las órdenes del demente Joseph Biden (DP), al que se considera presidente y pato cojo de EE.UU., crea que EE.UU. podría caer en la insolvencia antes de que Donald Trump (RP) tome posesión de su cargo, ha alcanzado probablemente también a uno de los Estados vasallos más importantes de EE.UU. con el Reino Unido en el bote. La disputa sobre el límite superior de la deuda estadounidense está en permanente ebullición.
En resumen: los gobiernos estadounidenses gastan más dinero del que ingresan. Por cierto, el déficit presupuestario estadounidense se ve agravado por el déficit comercial.
«El Tesoro anticipa actualmente que el nuevo límite se alcanzará entre el 14 y el 23 de enero, momento en el que será necesario que el Tesoro tome medidas extraordinarias», dijo Yellen en una carta a los legisladores del Congreso de EE.UU. el viernes 27 de diciembre de 2024 (hora local). Pidió a los miembros del Congreso estadounidense, que es un sistema bicameral -el personal, normalmente millonario, procede del sistema bipartidista, que está en manos de la burguesía estadounidense-, que actúen «para proteger la solvencia sin restricciones de Estados Unidos.»
Si no se contrae nueva deuda para EEUU y, por tanto, para los ciudadanos estadounidenses, entonces la deuda existente ya no podrá pagarse.
